El trabajo analiza la deserción estudiantil en tres unidades académicas de la Universidad
Nacional de Córdoba, Argentina, sobre una cohorte de ingresantes para la que se modela el
riesgo de abandono e identifican algunas variables que contribuyen a explicarlo. Se utiliza el
método de Kaplan-Meier y un modelo de riesgo semi-paramétrico. La inactividad académica
prolongada se toma como proxy de la variable dependiente. Los resultados muestran la curva
sobrevivencia y el riesgo relativo por facultad. El promedio del secundario aparece como
importante predictor de la deserción, con un efecto inverso. Los estudiantes que costean sus
estudios con aporte familiar exclusivamente tienen mayor riesgo relativo de abandono
respecto de aquellos que lo hacen con su trabajo personal únicamente. La relación cantidad de
materias aprobadas respecto a cantidad de materias rendidas posee un efecto marginal
importante. Tanto la procedencia del estudiante como la facultad en que cursa los estudios
tienen efectos significativos.