Recientemente reportamos que la discontinuación de un tratamiento crónico con etanol facilita el condicionamiento de miedo contextual. Además, es conocido que la exposición a situaciones estresantes promueve el consumo de alcohol y animales dependientes al etanol se autoadministran alcohol para atenuar las consecuencias aversivas del síndrome de abstinencia.
El objetivo del presente trabajo fue evaluar el impacto de la evocación de una memoria aversiva sobre la autoadministración de etanol en animales abstinentes al etanol.
Ratas Wistar machos recibieron una dieta liquida con etanol (6%v/v) durante 14 días. Tres días después de la interrupción del tratamiento crónico, fueron sometidas a una sesión de condicionamiento contextual (3 shocks 0,4mA, 3s, ITI:30s). La conducta de congelamiento se evaluó 24h después por exposición de los animales al contexto asociado al shock o a un contexto novedoso y 3 horas después se inicio el test de preferencia utilizando el paradigma de libre elección entre dos botellas, agua o etanol. La concentración de etanol (v/v) se incrementó como se indica: días 1-4:2%; 5-8:4%; 9-12:6%, 13-20:8%.
Se observó un incremento en el consumo de etanol únicamente en animales abstinentes sometidos al paradigma de miedo condicionado y re-expuestos al contexto asociado al shock. La evocación de la memoria de miedo incrementó el consumo de etanol (g/kg/3h) en concentraciones del 6 y 8% v/v en animales abstinentes pero no fue un evento aversivo suficiente para modificar el patrón de ingesta de etanol en animales controles.
La facilitación en la formación de memorias aversivas y la mayor vulnerabilidad a la reincidencia en el consumo de etanol observada en los animales abstinentes sugieren el desarrollo de un proceso de sensibilización emocional como consecuencia de la experiencia previa de abstinencia al etanol que altera la respuesta emocional a eventos subsecuentes.
