MONDINO GABRIELA
Congresos y reuniones científicas
Título:
La construcción discursiva del cuerpo femenino. Procesos de reescritura y desnaturalización de género en Arráncame la vida y Pasión de historia y otras historias de pasión
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Congreso; VII Congreso Internacional Cátedra UNESCO; 2013
Institución organizadora:
Facultad de Lenguas
Resumen:
El objetivo de este estudio es abordar desde una perspectiva comparatística los procesos de construcción del cuerpo femenino representados en la novela Arráncame la vida (México, 1993) de Ángeles Mastretta y relatos de Pasión de historia y otras historias de pasión (Puerto Rico, 1994) de Ana Lydia Vega. Las categorías teóricas que orientarán el análisis de los textos literarios que constituyen el corpus de trabajo serán el concepto de habitus de Pierre Bourdieu y el concepto de cuerpo como  cartografía cultural de Andrea Ostrov. La propuesta de este análisis implica partir de la consideración de que el cuerpo, principalmente el cuerpo femenino, es una superficie sobre la que se configura una determinada cartografía corporal; sobre el cuerpo de la mujer están inscriptas algunas marcas provenientes de la cultura y, a través de la escritura, es posible rastrear estas inscripciones determinadas por el género. Existe en los textos literarios que constituyen el corpus una construcción discursiva que crea los atributos propios de lo masculino y de lo femenino, a partir de esta construcción discursiva la mujer se distancia de la representación canónica de los atributos de género aunque sin proponer una corporalidad totalmente nueva. En el proceso de reescritura se remarca, se visibiliza o se subraya un mapa corporal determinado. Reescribir es un proceso que permite desnaturalizar el cuerpo y recuperarlo del dominio de ?lo natural, de lo dado y de lo construido culturalmente.Ángeles Mastretta y Ana Lydia Vega remarcan los trazos de una geografía canónica inscripta en el cuerpo de la mujer, re-escriben el cuerpo femenino y ponen en evidencia lo normalizado o normativizado del género, la representación de estos trazos no implica su aceptación sino que, por el contrario, se establece como un modo de (de)construcción de lo culturalmente estructurado.