El presente trabajo se propone indagar las condiciones histórico-conceptuales que hicieron posible la articulación de la pregunta filosófica acerca de la fundamentación de la subjetividad con el problema de la legitimación de la representación artística. A tales efectos, el mismo se concentra en el análisis de la tercera crítica kantiana. El objetivo es clarificar el vínculo existente entre la crisis de la fundamentación filosófica y la decadencia del paradigma mimético, por una parte, y entre el concepto de belleza y la forma de la razón unificada, por la otra.