Los procesos decisorios son hoy más emocionales que racionales?

Encuentro; Encuentro Regional ADENAG Centro Oeste y Noroeste; 2020

UNC y UNT

Todo ser humano realiza la actividad continua de tomar decisiones en los diferentes órdenes de la vida. Este proceso deliberado es previo a la acción y por ello es siempre con perspectiva de futuro. Cada decisor enfrenta este proceso condicionado por su propia visión del mundo y su capacidad de razonamiento. Debido al apremio de la vida moderna que obliga, tanto a las personas como a las organizaciones, a tomar decisiones rápidas y efectivas resulta interesante profundizar acerca del proceso de la toma de decisiones y la necesidad de re-construir una teoría acerca de ellas. Más aún, si se considera al administrador situado en organizaciones cada vez más versátiles y en entornos tan dinámicos e inciertos como responsable de llevar adelante este proceso decisorio con la finalidad de lograr un mejor desempeño. Se sabe que la teoría presenta una gran variedad de ?teorías de la elección racional? con aportes desde el campo de ciencias de la conducta de Watkins (1974), Toulmin (1974), Chomsky (1974) y Elster (1979); como también, de Bunge (1985) y Pavesi (1997). Sin embargo, la investigación actual hace hincapié en que la toma de decisiones como un complejo proceso no sólo un racional sino un proceso influido por las emociones. Estas emociones del ser humano desarrollan un papel beneficioso y adaptativo ya que guían al organismo, en función de sus necesidades presentes y futuras, hacia las opciones más apropiadas, no son un límite a la razón sino que la condicionan, la modelan y le dan sentido. En este trabajo nos proponemos complementar la racionalidad que dominó el campo de la teoría de las decisiones poniendo énfasis, en línea con el estado del arte, en que la toma de decisiones no es un mero proceso racional sino un proceso influido también por aspectos psicológicos y cognitivos que gobiernan nuestro pensamiento. En este sentido, revisamos los aportes que las neurociencias han hecho sobre el papel de las emociones en la toma de decisiones y los desafíos de su aplicación a fin de contribuir al desempeño organizacional deseado.