AZCONA NOELIA
Capítulos de libros
Título:
Crónica de una virtualidad deseada
Libro:
La Fuerza de la Virtualidad
Editorial:
Editorial Económicas
Referencias:
Lugar: Córdoba; Año: 2021; p. 263 - 265
Resumen:
ExperienciaHace más de diez años que pertenezco a la Cátedra de la materia de Derecho Constitucional y Administrativo. Comencé a formar parte de este grupo de profesionales cuando el claustro docente tenía otra conformación. En ese entonces la cátedra a distancia estaba a cargo de una docente que tenía un cargo con semi dedicación y se le había asignado la cátedra a distancia para que tuviera más carga horaria. En mis preferencias siempre estuvo la docencia en modalidad distancia, a pesar de lo que me fascina estar frente a los alumnos: me siento pez en el agua hablando con jóvenes, me renuevan las ganas de confiar en lo que sigue ?sobre todo a nivel país? cuando veo el esfuerzo por superarse que ponen, incluso en una materia que no es necesariamente de su agrado (?eligieron números y no leyes?). Transcurrieron unos años y quedó vacante ese espacio virtual, al que pude acceder por especial interés y gracias a los nuevos docentes a cargo de la materia, quienes me lo permitieron. Pensar en dedicarme al aula virtual implicaba ?para mí? abrir la posibilidad de una comunicación prácticamente sincrónica con los alumnos, más allá del espacio y el horario. Me imaginaba que cuando ellos escribían un mail (en ese momento esa la vía de comunicación más utilizada) era porque se les había presentado una duda en su vida cotidiana, más allá de las horas de clases, incluso en medio de su rutina personal. Mi imaginación era bien concreta: mi ilusión era que les podía surgir una inquietud sobre derecho constitucional mientras, por ejemplo, hacían la fila del McDonald´s de la Plaza España, en plena Nueva Córdoba, donde hay periódicos disponibles y ?en ellos? disparadores de temas de la materia. Brindar la posibilidad real y casi inmediata de tener acceso a los profesores, eso era lo que estaba dispuesta a cubrir. Para mí, desde hace ya mucho tiempo, la educación debe intentar ser cercana desde la palabra, más que desde la presencia física. Y, en medio de este proceso de apertura a lo virtual, ocurrió la pandemia y nos virtualizó en un todo. Me sentí con una oportunidad única de incentivar a los alumnos a estudiar desde sus casas y a generar hábitos propios manejando sus tiempos para lograr buenos resultados, acompañando en todo lo que se consultaba e implementando nuevas opciones (como lo fueron los exámenes a través de Respondus). En lo que a mi desarrollo como docente respecta, soy abogada, así que manejar espacios que tienen que ver con la programación de un examen en línea fueron un tremendo desafío que gracias al personal del FyPE pude sortear, y luego pude sonreír al ver que se hacía el momento del examen (parcial o final)y nadie se quejaba en el chat del AVE. Ante la ausencia de reclamos, la buena noticia se imponía en cada minuto que pasaba: ¡ya todos estaban rindiendo!Agradezco a las autoridades de la Facultad por la gestión en estos tiempos nuevos.Agradezco el fantástico acompañamiento que ha hecho el personal del FyPE. Agradezco a los docentes de la Cátedra por dejarme estar en ese espacio virtual, el que puede resultar intangible pero siempre demanda ?irónicamente? presencia. Y sobre todo agradezco a los alumnos, quienes saben receptar con paciencia lo que una va intentando aprender.