Efectos distributivos del gasto público social en Argentina, con énfasis en educación y salud

Córdoba

Congreso; 45º Jornadas Internacionales de Finanzas Públicas; 2012

Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba

Uno de los principales temas de atención del Estado es  contribuir a que la distribución de los recursos económicos sea más equitativa. La política fiscal constituye uno de los instrumentos más adecuados para realizar tal contribución. Esto es así debido a que los costos y beneficios de la política fiscal no se distribuyen uniformemente en la población, puesto que la intervención estatal modifica los ingresos de las personas, generando ganadores y perdedores.   En este sentido, el estudio de la incidencia del gasto trata de establecer quiénes se benefician del mismo, y si existe algún diferencial entre grupos.   Por esta razón, se propone analizar la incidencia fiscal  del gasto en salud y en educación.  Este análisis es de importancia puesto que el gasto que realiza el sector gobierno en determinados sectores tiende a modificar la distribución del ingreso, haciéndola más o menos progresiva, según dichos gastos se concentren en los estratos de menores o mayores ingresos, respectivamente.    Se propone analizar la Curva de Concentración del Gasto Público en Salud y Educación. Dicha curva se utiliza para analizar la equidad en la distribución del Gasto. Vale decir, si se diagrama en el eje horizontal el porcentaje acumulado de personas ordenadas de menor a mayor ingreso y en el eje vertical el porcentaje acumulado del gasto social, con la diagonal reflejando una situación de igualdad distributiva o de proporcionalidad exacta, se podrá tener una idea de  la focalización que ha tenido el gasto público respecto a los más pobres. A su vez, la comparación de dicha curva con la Curva de Lorenz revela cuán progresivos son dichos gastos.   Empleando el enfoque de incidencia del beneficio, se puede identificar al beneficiario del gasto público (gasto en salud o en educación) y la magnitud del beneficio respectivo, especificando cuánto ingreso debería recibir si tuviera que pagar por sí mismo el costo completo del servicio público.  Vale decir, se busca medir el beneficio del servicio público utilizando su costo y, utilizando información sobre la utilización de dicho servicio en cada estrato de ingresos, se distribuye entre los distintos estratos el monto de lo que cuesta la provisión del servicio de salud y educativo.  Se propone cuantificar el impacto del gasto público social sobre la distribución del ingreso mediante la curva de Lorenz del ingreso familiar. De esta manera, se procedería a imputar una curva de Lorenz  en la situación en la que no se contempla el gasto público, y la Curva de Lorenz en la cual se le imputan los gastos de educación y salud a los individuos receptores de dichos gastos.  De esta manera, se podrá inferir si existe una modificación en la distribución del ingreso con posterioridad a dicho gasto público.  De esta manera, se pueden obtener indicadores (Curva de Lorenz y coeficiente de Gini) post gasto de los individuos en educación y salud- y de esa forma, se podrá analizar si la distribución del ingreso se distribuye más o menos progresivamente que antes del gasto.   Sin embargo, el cálculo del subsidio bruto es insuficiente para estimar el efecto distributivo de la intervención del estado a través de las políticas sociales. Esto se debe a que el gasto social debe financiarse y, a su vez, a que los estratos de la población participan de dicha financiación. Por esta razón es importante calcular el subsidio neto de impuestos que percibe la población en los distintos deciles de ingreso.  Siguiendo a Harriague y Gasparini (1999) se realizarán dos ejercicios teóricos para medir la incidencia del sistema impositivo sobre la distribución del ingreso, suponiendo dos sistemas impositivos alternativos: proporcional y regresivo. De esta manera, se podrá inferir el efecto neto del Gasto Público Social sobre la distribución del ingreso en Argentina.