Resumen:
La importancia de estudiar la estructura productiva de una economía en términos del tipo de
bienes producidos y del grado de concentración de la misma radica en que ésta es determinante
del desempeño de la economía.
A partir del análisis realizado pudo observarse el significativo grado de concentración de la
estructura productiva de Córdoba en actividades de servicios (Inmobiliaria, Construcción y
Comercio minorista), en bienes primarios (Cereales y oleaginosas y Cría de ganado y leche) e
industriales intensivos en recursos naturales (Aceites, Lácteos y Matanza de ganado). Siendo las
actividades Automóviles, Autopartes y de Maquinaria agrícola las industrias difusoras de
conocimiento con mayor peso en la provincia, aunque con una participación relativamente baja
respecto a su PBG.
En cuanto a la estructura de exportaciones, cobran mayor relevancia los bienes industriales
respecto a los primarios. Sin embargo, los bienes industriales exportados son principalmente
intensivos en recursos naturales (Aceites, Lácteos, entre otros), aparecen en menor medida
algunas actividades difusoras de conocimiento como Vehículos automotores y Autopartes. Por
último, es importante la participación del sector de Cultivos de cereales, oleaginosas y pastos
forrajeros, el cual ocupa el segundo lugar entre las principales actividades exportadoras luego de
Aceites y subproductos.
Con la finalidad de aportar mayores evidencias que revelen la concentración en Córdoba, se
analizó el grado de concentración de los eslabonamientos productivos generados por las
principales actividades productivas en términos de compras y ventas intermedias. Las primeras
cuatro actividades generadoras de eslabonamientos hacia atrás tienen una concentración elevada
de sus compras intermedias en pocos sectores. Estas actividades son Aceites y subproductos,
Cultivo de cereales, oleaginosas y pastos forrajeros, Lácteos y Matanza de ganado. Luego existe un elevado nivel de concentración en las compras intermedias para la mayoría de las
actividades productivas con alto VBP, excepto para el sector de la construcción y el comercio
minorista.
Las cuatro actividades con mayor nivel de ventas intermedias son Cultivos de cereales y
oleaginosas, Cría de ganado, producción de leche y lana, Publicidad, servicios profesionales y a
las empresas y Carga, camión y FFCC. Se observa un nivel de concentración entre moderado y
elevado en las ventas intermedias para la mayoría de las actividades productivas con significativa
participación en el VBP provincial, excepto para el Comercio minorista.
La concentración en la producción y exportación de bienes primarios y bienes industriales
basados en recursos naturales pero que generan pocos eslabonamientos hacia atrás y hacia
delante impide que el progreso tecnológico se difunda hacia el resto de la matriz productiva en
forma aproximadamente homogénea. La consecuencia de ello es la existencia de heterogeneidad
en los niveles de productividad laboral.
Las actividades de mayor productividad, vinculadas en forma directa o indirecta con el sector
transable, no alcanzan a absorber toda la mano de obra disponible en la economía. Esto genera
brechas de productividad entre las actividades especializadas y el resto de los sectores,
generalmente vinculados con la producción de bienes no transables, servicios, actividades
informales y de subsistencia.
La heterogeneidad observada produce desigualdades en la distribución del ingreso. Se observó
una relación positiva existente entre nivel de productividad laboral y salario. De esta manera, los
sectores informales de menor productividad empujan la media salarial de la economía provincial
hacia abajo.
Estos resultados permiten clasificar a la economía de Córdoba como una economía periférica,
caracterizada por una elevada concentración en su estructura productiva y un marcado nivel de
heterogeneidad en la productividad sectorial lo cual genera algunos inconvenientes desde el
punto de vista socioeconómico. En primer lugar, una estructura productiva diversificada y
especializada en bienes de alto contenido tecnológico favorece el desborde de conocimiento
(knowledge spillovers) y la difusión del progreso técnico al resto de las ramas productivas lo que
promueve cambios estructurales en la dirección buscada, disminuyendo el grado de
heterogeneidad en la economía. Por el contrario, una economía concentrada en pocos sectores
con escasos eslabonamientos productivos hacia atrás y hacia delante frena la mencionada
difusión.
En segundo lugar, la heterogeneidad frena los impulsos de cambios estructurales a través de dos
vías: al reducir los niveles medios de productividad, reduce los estímulos a la inversión. Mientras
que al reducir los niveles medios de ingresos, salarios principalmente, deprime la demanda y con
ello los incentivos a incorporar tecnología por parte de las empresas, puesto que las técnicas
modernas requieren de una escala mínima de producción y ventas para ser viables
económicamente
Se necesita entonces promover cambios en la estructura productiva de la economía periférica que
diversifiquen la producción y que eleven los niveles medios de productividad laboral. Estos
cambios deben provenir de una serie de innovaciones que contribuyan con la diversificación
productiva en sectores dinámicos y difusores de tecnologías. La finalidad es reducir las
desigualdades observadas en los niveles de productividad y distribución del ingreso propias de
una economía heterogénea, a la vez que se intenta atenuar las restricciones externas a las que se
enfrenta la periferia.
Se remarca la importancia de generar ventajas comparativas en la producción de bienes que
pertenezcan a cadenas productivas extensas, para de este modo generar incentivos a la difusión
de tecnología a partir de eslabonamientos hacia atrás y hacia delante. El objetivo es lograr una
estructura productiva y de exportaciones en donde los sectores dinámicos y con alto contenido
tecnológico tengan una elevada participación.
En este sentido, un entorno macroeconómico estable y con relativa previsibilidad es condición
necesaria para el desenvolvimiento de inversiones que se traduzcan en innovaciones productivas.
Sin embargo, existen otras condiciones también necesarias de índole microeconómico
determinantes de dicho desenvolvimiento. Las condiciones microeconómicas refieren a la
remoción de fallas de mercado. Estas fallas impiden un mayor crecimiento en la tasa de
innovaciones, lo que se traduce en bajos incrementos en los índices de productividad. En este
sentido el Estado debe intervenir con la finalidad de complementar al mercado promoviendo
políticas de apoyo al sector productivo en forma tal de estimular la inversión y la innovación.