La localización de las actividades productivas depende de diversos factores de orden económico, los cuales al modificarse producen procesos de relocalización de actividades económicas, que influyen de manera dramática en el bienestar de las personas y en la productividad de los factores fijos, tanto de las regiones perjudicadas que resignan actividades como de aquellas beneficiadas que las receptan.
La última década fue testigo de al menos tres acontecimientos que sin duda afectaron las variables de localización de las empresas y de sus actividades; nos referimos al proceso de globalización, al nacimiento del MERCOSUR, y a las profundas transformaciones económicas y sociales acaecidas en nuestro país. A estos hechos del “siglo pasado” debemos agregar la salida de la “conversión”, con devaluación y pesificación, que nuevamente conmocionó las estructuras e incentivos vigentes (pero que aquí no trabajaremos empíricamente por carencia de datos).
Teniendo en mente que los cambios en factores, claves a la hora de evaluar la rentabilidad privada de las empresas, pueden desatar un proceso de reubicación de actividades, nos proponemos en este trabajo abordar esta problemática.
Con tal propósito, realizamos un análisis sectorial para detectar cuáles han sido los sectores económicos que se han visto más afectados, para lo cual utilizamos la desagregación del producto en nueve grandes divisiones (GD).Además acudimos a cuatro formas de territorialización del espacio nacional, las cuales hemos dado en llamar “modelos”.