FIGUERAS ALBERTO
Congresos y reuniones científicas
Título:
La economía como ciencia social territorial,
Lugar:
Rosario
Reunión:
Congreso; 16 Congreso Nacional de Profesionales de Ciencias Económicas; 2006
Institución organizadora:
Fed. Argentina de Consejos Profesionales
Resumen:

Si se nos pidiera un perfil del proceso histórico–económico a lo largo de los tiempos, dos aspectos podrían caracterizarlo: la progresiva aceleración de la historia y las sucesivas ampliaciones del espacio económico.

 

A partir del siglo XVI, Europa bajo la hegemonía primero de España y luego del Reino Unido, extiende su influencia a todo el orbe; esto origina, también, una cada vez mayor coincidencia de los ciclos económicos entre países y regiones. Desde la crisis de los años 70 y 80 del siglo XX, los nuevos protagonistas de esta unificación económica, más acentuada todavía que en siglos pretéritos, son las empresas y los bancos multinacionales. Es precisamente en los ’70 que las nuevas tecnologías que emergieron a fines de los sesenta consolidan su presencia: la electrónica y la informática, acompañadas con la biotecnología, los nuevos materiales y novedosas formas de energía. Combinación ésta que genera una explosión de nuevos productos y servicios que modifican el mundo de la producción y del consumo. La necesidad de fondos para financiar estas costosas nuevas tecnologías lleva a la concentración de empresas ¡a nivel internacional, y con una amplitud desconocida! Esta lucha de supervivencia entre multinacionales revela claramente el proceso de globalización.

 

En definitiva, dentro de ese contexto, y como resultado de la revolución electrónica y cibernética, se han disparado grandes procesos económicos contemporáneos, como la veloz transformación de la producción, de la organización de las empresas y del propio trabajo. Sin dudas, que el impacto es vasto y a la vez intenso, alcanzando todos los ámbitos de la vida humana y de la sociedad, con fuertes efectos “espaciales” e incremento en los niveles de concentración geográfica de la actividad económica.

 

Remarcamos esto: el impacto de este fenómeno, cuya percusión ha partido del ámbito económico, alcanza todas las aristas de la vida social, con diversas modalidades, e intensidad, según los distintos territorios(regiones y países). Esto es, el efecto de la globalización es espacialmente heterogéneo; y exige un esfuerzo de los economistas, incluso con nuevas herramientas, para analizarlo en su  impacto territorial con una visión totalizadora (dada la magnitud del fenómeno). Pese a ello, y equivocadamente, nuestra “ciencia” intenta, cada vez más, afrontar el estudio de la realidad socio-regional “alejada” de sus hermanas disciplinares. Por eso entendemos necesaria una reflexión sobre el papel de nuestra disciplina como una ciencia social en el estudio del territorio, en el actual marco histórico de la globalización.