Resumen:
En otras palabras, la experiencia que el ser humano tiene del mundo no es independiente de la naturaleza de su cuerpo. Los sentidos de la vista, el tacto, el olfato, el gusto y el oído; la capacidad de moverse y de cambiar; la posición vertical y la horizontal; las partes del cuerpo; la incapacidad de atravesar paredes o ver a través de objetos sólidos: todas estas características, entre otras, están en la base de la percepción del mundo, y también en la de su conceptualización. Este proceso se denomina, en las ciencias cognitivas, corporización (embodiment). En el presente trabajo mostraremos cómo el calor es una experiencia que sirve para conceptualizar experiencias subjetivas que los seres humanos tenemos con los afectos y los conflictos. Se trabaja sobre el corpus de referencia del español actual.