Resumen:
En Balún Canán la cuestión del indio está planteada, como en todas las novelas indigenistas y neoindigenistas, desde la alteridad y el distanciamiento que supone escribir desde una raza, la blanca, en el idioma del colonizador y desde una posición social hegemónica, por más que Rosario Castellanos haya participado activamente en organismos e instituciones dedicadas a trabajar para la reivindicación socio-económica de los indígenas (como lo es el Centro Coordinador de Chiapas del Instituto Nacional Indigenista) y que se haya jugado personalmente a favor de ellos. Sabemos que la publicación de sus novelas le costó grandes disgustos entre sus familiares y miembros de las familias acomodadas de Comitán, pues dejaban al desnudo los desajustes, las contradicciones y las injusticias de las relaciones sociales entre la clase dominante y los indígenas.