Identidades juveniles:participación estudiantil, empleo juvenil y salud

Córdoba

Encuentro; Proyecto Trámite 30720130101210CB Equipo de Investigación en Identidades Juveniles Dirigido por la Dra. Margarita Barron; 2014

Centro de Investigaciones de la facultad de Filosoia y Humanidades

A - INTRODUCCIÓN En los últimos años, los discursos de y sobre los jóvenes han ocupado un lugar de creciente relevancia tanto en la comunidad académica cuanto en el colectivo social extendido. En efecto, las transformaciones culturales, familiares, institucionales y tecnológicas que se suceden velozmente en sociedades como la nuestra, convocan con especial intensidad a los adolescentes y los colocan como protagonistas de fenómenos emergentes. Novedosas formas de intervención ciudadana, corporalidades alternativas, tecnoescrituras, reconfiguraciones familiares o nuevas estrategias para la integración al mercado laboral son sólo algunas de las expresiones que, en definitiva, condensan subjetividades, sociabilidades y sensibilidades urdidas en el inestable escenario de la modernidad tardía. Desde hace más de una década, este equipo de investigación tiene a la adolescencia como eje de trabajo y principal núcleo de interés. Durante los primeros años, se indagó en profundidad acerca de las conductas que ponían en riesgo la vida de los jóvenes cordobeses y los resultados condujeron a que, en el último bienio, analizáramos el modo en que las diferentes configuraciones familiares condicionan el desarrollo, la salud y las prácticas culturales de estos sujetos. A partir de tales entrecruzamientos y sobre la base de los resultados obtenidos, surgen tres focos de preocupación que constituirán los ejes primordiales de nuestra tarea investigativa para el próximo período: el involucramiento ciudadano/comunitario de los jóvenes cordobeses y su correlato en los medios de comunicación, las políticas de promoción de empleo que los tienen como destinatarios y las prácticas cronoculturales que tensionan las nociones habituales de preservación de la salud y cuidado de sí.En suma, emergencias ?en su doble valencia: como aparición y como urgencia ?de una época que se inscribe con fuerza en los cuerpos adolescentes mientras diluye las certezas que otrora cobijaban su crecimiento y amplía, de ese modo, el horizonte de lo posible. Al respecto, es necesario advertir que la crisis del proyecto neoliberal y el estallido de las formas tradicionales de representación(Cheresky, 2006; García Delgado, 2003) al que asistimos en los albores del siglo propiciaron el advenimiento de novedosas formas de participación ciudadana y la resignificación de los mecanismos habituales de intervención Estos procesos involucraron cambios en el lugar ocupado por los jóvenes en el debate público que fueron oportunamente descriptos por académicos preocupados por el lugar de los adolescentes en nuestra sociedad. En 1999, una publicación del Grupo de Trabajo sobre Juventud de Clacso exponía un estado de situación que advertía acerca de la privatización de la vida juvenil que caracterizaba el fin de los ?90 pero, por otra parte, señalaba la aparición de nuevos paradigmas de participación alejados, no pocas veces, de la lucha por el poder estatal y sensibles a problemáticas localizadas, fragmentarias y modificables mediante la acción específica y directa (Cf. Balardini, 2000; en especial, los artículos de Marcelo Urresti y Dina Krauskopf). Diez años después, diferentes investigadores (Saintout 2009ª, 2010 y 2013; Chaves, 2010; Natanson, 2012) advirtieron el regreso de los jóvenes a la política y comenzaron a preguntarse por las particulares características que asumía su involucramiento en la primera década del siglo.