Una de las características principales del discurso político es el despliegue de estrategias discursivas que establecen o modifican relaciones de poder. El análisis de ese discurso nos permite además develar algunos aspectos ocultos del mismo y explorar la ideología subyacente que puede no percibirse por no estar presente de manera explícita. Según explican Wodak et al. (1999), el análisis debe considerar al discurso tanto oral como escrito como una forma de práctica social; es decir, existe una relación dialéctica entre los actos discursivos y las situaciones, instituciones y estructuras sociales en las cuales se encuentran insertos. Por ello, a los fines del presente análisis y para explorar elposicionamiento de los candidatos a presidente de EE.UU. en 2008, de su partido político y de su país frente al mundo, resulta de gran utilidad la taxonomía diseñada por Wodak et al. y de Cillia et al. (1999) la cual caracteriza la construcción discursiva de la identidad nacional.
Wodak et al. (1999) explican que el discurso desempeña varias macro funciones sociales. Es a través del discurso que los actores sociales se constituyen en objetos de conocimiento, construyen situaciones y asumen roles sociales e identidades, además de conformar relaciones interpersonales entre distintos grupos sociales y aquéllos que interactúan con tales grupos. En primer lugar, los actos discursivos, dicen Wodak et al., son en gran medida responsables por la construcción de condiciones sociales particulares. En segundo lugar, los actos discursivos contribuyen a restaurar, legitimar o relativizar el statu quo social.
En tercer lugar, los actos discursivos ayudan a mantener y reproducir ese statu quo. En cuarto lugar, los actos discursivos son efectivos al momento de la transformación o destrucción de dicho statu quo. A los fines de lograr estos objetivos, los hablantes utilizan distintas estrategias discursivas, como por ejemplo estrategias de construcción, de perpetuación de justificación, de evitación, y/o de desdén o desaire. Ricento (2003) retoma esta clasificación y la utiliza para ilustrar la construcción discursiva del americanismo. Ricento las llama estrategias retóricas porque están diseñadas para configurar el pensamiento y persuadir a la
audiencia o al lector. En otra dimensión de análisis Wodak et al. ubican a las formas de realización (que para Ricento son estrategias lingüísticas); es debido a estas formas de realización que se hace necesario considerar los textos desde una aproximación lingüística.
Para poder comprender el uso y sentido de las estrategias discursivas (i.e.; retóricas y lingüísticas) y las maneras en las que los hablantes se construyen a sí mismos y a la realidad que los rodea, Fairclough (1992/2002) especifica que el análisis del discurso debe ser interdisciplinario incorporando al análisis del texto el análisis del contexto en términos de las circunstancias históricas y políticas que dieron origen al discurso objeto de estudio. En otras palabras, el análisis debe explorar no sólo la dimensión lingüístico-retórica sino también la dimensión histórico-política de la cual el discurso forma parte.
Finalmente, tanto el análisis discursivo como el histórico-político conducen al descubrimiento de la dimensión ideológica del discurso (van Dijk, 1995; Fairclough & Wodak, 1998). Fairclough y Wodak sostienen que dicha dimensión ideológica no está presente de manera explícita pero sí se revela por medio del discurso. Las formas lingüísticas, según ellos, ocultan relaciones de poder y dominación; es a través de la ideología que los hablantes logran el consenso de su audiencia y así pueden ejercer su poder. La importancia del análisis del discurso radica en que hace visibles esas relaciones asimétricas y permite a la audiencia / los lectores tomar conciencia de su existencia y actuar en consecuencia.
Los debates presidenciales en Estados Unidos constituyen un tipo importante de discurso político a través del cual los candidatos despliegan una serie de estrategias lingüísticas y retóricas. Resulta significativo analizar dichas estrategias a fin de comprender los modos en que los candidatos intentan capturar votos al momento de las elecciones.
