Memorias ya consolidadas pueden entrar nuevamente en un estado lábil después de la evocación, requiriendo de un proceso de re-estabilización, llamado reconsolidación, el cual es dependiente de síntesis de proteínas. El significado funcional de este proceso no es conocido; una hipótesis propone que dicha fase es esencial para la incorporación de información de nuevas experiencias a la memoria original, lo cual se define como actualización (updating) de la memoria.
Ratas Wistar machos adultas fueron sometidas a un paradigma pavloviano de miedo condicionado a un contexto utilizando 1 solo shock (sesión de entrenamiento débil). Un día después del entrenamiento, las ratas fueron sometidas a una situación estresante (inmovilización por 30 min.) y otro grupo mantenido en sus cajas sin manipulación. La mitad de las ratas fueron re-expuestas al contexto original de condicionamiento (test 1) durante un período de 3 min. 24 hs después del estrés. Se observó un aumento en la expresión de ?freezing? solo en aquellos animales re-expuestos al contexto asociado, el cual se mantuvo 10 días después durante una nueva re-exposición al contexto (test 2). Las manipulaciones farmacológicas (benzodiacepinas o antagonistas NMDA) que atenúan las consecuencias del estrés o impiden la reconsolidación de la memoria de miedo, así como períodos muy breves de re-exposición al contexto asociado impidieron dicho aumento del comportamiento de freezing. Se concluye que la reactivación de una memoria de miedo ya consolidada permite la incorporación de nueva información correspondiente a un evento traumático (estrés inescapable).