La profunda reestructuración de las relaciones entre el Estado y la sociedad durante la década de los noventa, orientada por modos de producción de políticas y en valores sustentados desde posiciones neoliberales, resultó en importantes impactos en la definición de políticas educativas y en las orientaciones del sistema educativo.
Mientras el Estado nacional muda su responsabilidad directa sobre los servicios educativos (Estado benefactor) por un aumento en la ?vigilancia y el control? sobre el funcionamiento de los sistemas educativos (Estado Evaluador), promueve nuevas formas de organización y gestión de los sistemas educativos incrementando la capacidad de los centros escolares para tomar decisiones (autonomía) y la responsabilidad por los resultados de la educación.
Esta presentación tiene como propósito comunicar resultados de una investigación sobre los nuevos procesos de regulación del sistema educativo y cómo impactan/afectan particularmente en la gestión de las instituciones educativas y el trabajo docente.