En los últimos cincuenta años la sociedad contemporánea viene transitandopor profundos cambios sociales, políticos y culturales que remiten a dosdenominaciones fuertemente interrelacionadas: globalización y sociedad del conocimiento.

Esos cambios societales están impactando en los sistemas educativos,afectando particularmente a la universidad, una de las instituciones socialesque han sentido crujir sus cimientos aunque no necesariamente han acusado yprocesado los cambios contextuales en las dinámicas institucionales o al menossi lo hacen ocurre muy lentamente.

Sabido es que la Universidad tiene como principal cometido la producción, transmisión y diseminaciónde conocimientos y saberes. Las disciplinas y sus particulares dinámicasinternas de investigación y docencia constituyen el corazón de la universidad. Másdistante en el tiempo la extensión universitaria, bandera y conquista de laReforma del ´18, se incorporó como una de las funciones sustantivas de estainstitución. Un cometido que en los últimos años adquirió mayor relevanciaacadémica y social.

La tensión entre las presiones y demandas contextuales (desde arriba ydesde abajo) contemporáneas y los principios sobre los que se sostiene elsentido de la universidad como construcción histórica que hunde sus raíces enla baja Edad Media podría asociarse a lo que Renato Dagnino en el Documento queestamos comentando denomina ?situación de crisis, de disfuncionalidad? de lasuniversidades.

No obstante, el reconocimiento de estas ?disfuncionalidades?y las crisis de la universidad que a mediados de los noventa explicabaBoaventura de Sousa Santos, es preciso señalar que en los últimos diez años laeducación superior ha sido colocada en un lugar prioritario en las agendaspolíticas de los gobiernos de la región; tanto en políticas de ciencia ytecnología como en el aumento extraordinario de la inversión y elfinanciamiento universitario, aunque insuficientes todavía por los recortes quesufrieron en la década neoliberal, destinados al mejoramiento de la enseñanza ya la inclusión de amplios sectores de la sociedad históricamente excluidos,paradójicamente, de las universidades públicas.

En esa línea se colocan algunos comentarios del textoorientador de este panel para su posterior debate.