La actividad de investigación es una fuente importante decreación de conocimiento y desarrollo económico y productivo. Durante losúltimos veinte años, se ha dado en Argentina una fuerte expansión en lainvestigación científica, de la mano de diversas políticas públicas yuniversitarias.

A pesar de que los estímulosa la investigación han sido múltiples y diversos, surgen interrogantes respectoa la manera en que estas políticas se han implementado. El criterio paraestimular la investigación, principalmente en el ámbito académico, ha sidoeconómico y de reglamentación institucional. Estos criterios tecnocráticosdejan de lado la gestión de recursos humanos, que es imprescindible en unaactividad desarrollada de manera esencial por seres humanos creativos.

El objetivo de la ponenciaes examinar cómo juegan dichos factores en la práctica diaria de la actividadde investigación. En particular, se pretende mostrar algunas contradicciones,como el hecho de que ante una declinación fuerte de los estímulos económicosdurante los últimos años, la demanda de proyectos y número de investigadores haseguido creciendo.

Según una hipótesis delestudio, dicho fenómeno se explicaría, al menos en parte, por las fuertespresiones de tipo organizacional, institucional e incluso cultural queenfrentan los investigadores en la actualidad. Para aportar evidencia empírica,se trabajó con un estudio de caso dado por la Facultad de Ciencias Económicasde la UNC, donde se llevó a cabo un relevamiento en profundidad medianteinstrumentos cualitativos y cuantitativos.

Los resultados permiteninferir que existe un déficit en la gestión, destacándose fenómenos como lafeminización y burocratización progresiva de las tareas de investigación. Seconcluye que un management de la investigación menos tecnocrático y máscentrado en los recursos humanos de cada institución, podría ser clave paraasegurar que esta actividad siga creciendo con un alto estándar de efectividady aportes para el desarrollo.